15 Tatuajes de vampiros: Sangre, colmillos y más

A los vampiros desde que se conoce su figura se les han atribuido diferentes significados. En la Edad Media la jerarquía de la Iglesia Católica lo asociaba con la herejía, sobre todo en países de Europa del Este donde la iglesia católica no tenía tanta fuerza como en Europa Occidental, los no cristianos y no católicos eran considerados vampiros. Del mismo modo, en esa misma época, a los grandes señores feudales se les consideraba también vampiros, por eso de que explotaban hasta el extremo a los campesinos y siervos.

Con el paso de los siglos, la idea de vampiro se siguió asociando a lo oscuro, lo prohibido, pero también existía la idea del erotismo, los vampiros, esos seres que chupan sangre, sobre todo a damas, les muerden el cuello, una de las zonas más sugerentes del cuerpo. A los vampiros se les teme, pero también se siente cierto deseo por ellos. Aun así, seguían apareciendo como criaturas endemoniadas, nada humanizados, feos y poco agradables.

El cine ha ayudado a dulcificar esa idea de los vampiros, les ha dado cierta condición humana, al Drácula del cine se le teme, pero también se siente compasión por él, por su soledad. Otros vampiros famosos del cine incluso acababan siendo casi héroes, como por ejemplo Blade, que luchaba contra otras criaturas malignas y protegiendo a los humanos. Los últimos vampiros famosos del cine, si bien es cierto que es una adaptación de la literatura, son los de la saga Crepúsculo, en este caso los vampiros aparecen como criaturas muy humanizadas, con sentimientos humanos y todas sus preocupaciones.

Los vampiros, como vemos, siguen conservando ese aura de misterio, pero, ¿y las vampiresas? Las vampiresas retratan con mayor intensidad que los propios vampiros esa idea de erotismo, la carga sexual que desprenden las vampiresas es mucho más alta que la de los vampiros, esa piel blanquecina casi pálida, los labios de un rojo intenso, el cabello negro azabache y como no, su capacidad de morder y tomar sangre.

Muchos de los tatuajes que vemos sobre vampiros o vampiresas quieren reflejar ese alto contenido de magnitud de erotismo. Los góticos, la tribu urbana caracterizada por vestir de negro, timidez exagerada, desafección por la vida…tiene en los vampiros a alguno de sus elementos de referencia, por tanto no debe extrañarnos ver tatuajes de vampiros en más de un gótico o gótica.

Pero, ¿por qué no un tatuaje de vampiros, por ejemplo colmillos bañados en sangre, que signifique tu pasión por tener sed de conocimiento, sed de vida, sed de nuevos retos e ilusiones? Si a lo largo de la historia hemos ido asociándole diferentes significados a la idea de los vampiros, esta puede ser otra, quién sabe.