Tatuajes hawaianos (polinesios): Tortugas, orquídeas, tribales...

"Hawái, Bombay son dos paraísos que a veces yo me monto en mi piso". ¡Qué poco currada puede estar a veces la letra de una canción, por muy pegadiza que sea! Bueno, hoy vamos a hablarte de lo que, para muchos, es un paraíso terrenal, un mundo de color, un lugar para ir de vacaciones y del que no volver. Un lugar que puede marcarte para siempre y que por ello tú, a su vez, decidas marcártelo en la piel. Hablamos de Hawái.

Se trata de un estado de los Estados Unidos de América, el último en anexionarse al país y se encuentra en el oceáno Pacífico, en la Polinesia. Está ubicado en una zona rica en diversidad por lo que cuenta con una belleza singular y es muy elegida por turistas de todo el mundo para pasar sus vacaciones. Lo tiene todo: la belleza de sus paisajes, lo relajante de sus playas y una atrayente naturaleza salvaje que te llama a que cabalgues sobre sus olaso o a que colecciones algunas de sus piedras volcánicas. Aunque parezca mentira, esto no es un post sobre destinos en los que pasar tus esperados días de vacaciones, es sobre tatuajes. Pero tendremos que ponerte en antecedente, ¿no?

Un atardecer en la costa es un espectáculo que todo el mundo debería contemplar, al menos, una vez en su vida. Un atardecer en el que se mezcle el azul, el rojo, el rosado, el amarillo y el naranja, con un sol perfectamente redondo al que, por instantes, parece que lo vemos moverse, en el camino a su descansando detrás del horizonte marino. Es bello imaginárselo, pero más bello es observarlo. Imagínate si a la imagen le sumamos un marco de arena blanca, palmeras o volcanes cubiertos por una frondosa y verde vegetación. Lógicamente, es un reto para el tatuador que salga bien una composición de este tipo pero, ¿qué no debe tomarse como un reto? Puede ser difícil, pero un buen resultado merecerá la pena seguro.

Teniendo en cuenta al rica biodiversidad del paraíso que es Hawái (y, en general, las islas del Pacífico), mucho de los tatuajes de Hawáis están relacionados con la naturaleza, por ejemplo, con las flores. Ya hemos confesado en alguna ocasión que las flores a todo color son nuestra debilidad, sobre todo, si van acompañadas en una enredadera verde, como si de su tallo y hojas se tratase. En Hawái se puede encontrar muchas especies de flores y se le da tanta importancia que es habitual el atuendo hawaiano se relacione con la corona de flores (lei) y el colorido collar, con el que te sus gentes te dan la bienvenida acompañado de un afectuoso "Aloha!".

Una de las más conocidas, en lo que a flores se refiere, es la plumeria o plumaria con la que se elabora en muchas ocasiones el lei que, además, ha creado tendencia en, por ejemplo, estampados en telas de bañadores. Y eso que no es una flor indígena, sino de Centroamérica, pero que en Hawái se cultiva de forma abundante. Otro ejemplo es la orquídea, que se puede encontrar en multitud de colores y formas.

Plantas y animales de Hawái pueden representarse también de forma icónica, con motivos tribales, muy relacionados también con las etnias y culturas del Pacífico. Entre las propias tribus se pueden encontrar multitud de símbolos, si bien su origen y simbolismo puede ser confuso.

En fin, si no puedes disfrutar siempre de un paraíso como Hawái, puedes tatuártelo para llevarlo siempre contigo. Ahora es el momento de continuar con una galería con los diseños más comúnes en Hawaii..